Una gran parte de las nuevas empresas e instituciones tienen problemas muy importantes en el inicio de sus operaciones, por lo que muchas de ellas, sobre todo las micro y pequeñas empresas, tienen que desarrollar en corto tiempo, correcta y eficientemente esquemas y sistemas de administración, organización, operación, planeación y control necesarios.
Desafortunadamente un gran número de ellas no tendrán muchas probabilidades de llegar siquiera a los dos años de existencia.
Estas empresas tienen que lograr adquirir e implementar muy rápidamente una serie de capacidades que pudieran resultar complicadas, pues en muchos casos, por la misma dificultad que representa
tener limitaciones en la disponibilidad de recursos financieros, tecnológicos, humanos, administrativos y de operación, no pueden construir con solidez sus reservas financieras y de operación suficientes para solventar retrasos o problemas importantes en cualquiera de los factores que implican la puesta en marcha y
el desarrollo adecuado de su empresa.
Por lo anterior, en muchas ocasiones las empresas no pueden definir, establecer y adquirir desde un inicio, todas las características de calidad y de competitividad de sus productos o servicios,
conocer adecuadamente sus mercados y a sus clientes, establecer sus cadenas de suministros, contar con una administración que tenga las competencias suficientes, que sepa anticipar y definir los
problemas a los que se pudiera enfrentar la empresa.
Así mismo, se les dificulta planear, establecer estrategias, objetivos, programas y metas, tener una estructura de organización eficiente y enfocada a resultados, implementar
controles, contar con sistemas de información confiable y oportuna, tener los recursos financieros que necesite y que sean económicamente adecuados.
De la misma manera se les dificulta contar con los colaboradores idóneos, tener productos y servicios con buena calidad estable, conocer a sus competidores, establecer productos
diferenciados que le permitan acceder de manera más segura a los mercados, mantenerse como un proveedor confiable, puntual y de calidad, tener un sistema de distribución y de logística eficiente,
además de otros factores importantes para que generen la rentabilidad y la liquidez suficientes para asegurar su permanencia y su crecimiento.
Es comprensible que en muchos casos no puedan tener todo resuelto ni costear interminables intentos de prueba y error, ni tener en su organización al personal capacitado necesario, que pudiera
desarrollar con eficiencia y eficacia los trabajos de planeación, dirección y control deseables.
Es necesario que los empresarios estén vigilando constantemente la planeación y los resultados de su empresa, no deben confiar en reportes incompletos o en registros de datos que no proporcionan
información pertinente y oportuna para tomar decisiones acertadas, ni tampoco ser permisivos con las posibles fallas en sus informes y controles, ni con la medición del desempeño de todas las
áreas de su empresa, pues su misma supervivencia se pondría en riesgo.
Es recomendable entonces, que los empresarios y directivos de estas empresas traten de allegarse de la ayuda y la asesoría especializada que requieran para incrementar sus posibilidades de
éxito y para pasar de la difícil etapa inicial a una de desarrollo más sólido y rentable.
Nuestra empresa de consultoría tiene los consultores adecuados y la metodología necesaria para apoyar positivamente el desarrollo rentable de su empresa o institución.
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